¿Cómo perciben los colombianos a los medios de comunicación?
Los medios de comunicación tienen un papel importante en la consolidación democrática; son el portavoz de la opinión pública y vitrina de transparencia para las principales instituciones del país. La información que proporcionan afecta las posturas políticas de los ciudadanos y contribuyen en la conformación de las agendas y las decisiones que adoptan los políticos[1].
En las democracias, los medios enfocados en la trasmisión de noticias políticas tienen un papel determinante, ya que afianzan la relación que tienen los ciudadanos con la política, influyendo en las posturas y en la decisión de voto del electorado a través de la información que transmiten. Por esta razón, es importante que esta institución transmita información confiable y transparente.
En el caso colombiano, los medios de comunicación hasta el 2012 habían sido una de las instituciones públicas con más prestigio histórico, según datos del Barómetro de las Américas-LAPOP, realizado por el Observatorio de la Democracia de la Universidad de los Andes. Sin embargo, en el 2013 la confianza de los ciudadanos hacia los medios de comunicación sufrió un desplome. Para el 2012, el 60.5%de los colombianos manifestó confiar en los medios de comunicación, mientras que entre 2013 y 2016 este porcentaje se redujo a casi la mitad, llegando a 35.8% (Gráfica 1).
En el 2016 la baja confianza hacia esta institución fue generalizada en el territorio nacional. En concreto, en las principales regiones del país, menos de la mitad de los habitantes manifestó confiar en los medios de comunicación (Gráfica 2), siendo los residentes de la región Caribe los que más confían en dichas organizaciones (42.1%) y los habitantes de Bogotá quienes confían menos (24.9%) en ellas (Gráfica 2). Esta situación es preocupante debido a que históricamente fueron una de las instituciones con más prestigio a nivel nacional y al papel clave que tienen en una democracia.
Para profundizar sobre la imagen que tiene la ciudadanía sobre los medios de comunicación, a continuación, se expone la percepción de la ciudadanía frente su grado de representación y autonomía. La Gráfica 3 muestra que el 41.1% de los colombianos está de acuerdo con que los medios de comunicación representan bien las distintas opiniones que hay en Colombia y el 55.2% considera que los medios de comunicación están controlados por unos pocos grupos económicos (Gráfica 4). Este panorama requiere atención, debido a que menos de la mitad de los colombianos considera que los medios de comunicación son representativos de las distintas opiniones que hay en el país y más de la mitad afirma que están controlados por unos pocos grupos económicos. Esto último refleja la realidad de la tenencia de los medios de comunicación en Colombia. En síntesis para buena parte de la opinión pública los medios de comunicación no transmiten información imparcial o representativa de lo que piensan los colombianos.
Paralelo a lo presentado con anterioridad, el reconocimiento y la garantía de la libertad de expresión constituyen elementos imprescindibles de toda democracia que aspire a la representación adecuada de sus ciudadanos. En efecto, una de las grandes conquistas del Estado liberal fue asegurar la libertad de prensa cuya garantía constitucional busca proteger el derecho a informar y ser informado. En Colombia, la mayoría de personas considera que hay muy poca libertad de expresión, libertad de prensa y libertad para expresar opiniones políticas sin miedo.
La Gráfica 5 muestra que el 57.7% de los colombianos considera que hay muy poca libertad de prensa. Aún más crítico, el 61.1% de los ciudadanos considera que en Colombia hay muy poca libertad de expresión (Gráfica 6) y el 70.8% afirma que hay muy poca libertad para expresar las opiniones políticas sin miedo. Esta situación llama la atención porque en la historia del país han sido ocasionales[1] y no muy vigorosos los intentos estatales de censurar y limitar la libertad en el ejercicio del periodismo mediante procedimientos legales. Así haya algunos aspectos debatibles en el ordenamiento legal y en la interpretación judicial de las normas, lo cierto es que la prensa se mueve en un ambiente bastante estable y consolidado de independencia frente al Estado[2]. Probablemente, para los ciudadanos la libertad de expresión va mucho mas allá de los medios y se relaciona con la posibilidad de expresar puntos de vista a través del activismo o la protesta. Desde este punto de vista, la persecusión y acciones violentas en contra de los opositores, activistas y líderes sociales puede estar detrás de la precepción ciudadana sobre la poca libertad de expresión existente en Colombia.
[1] Durante la dictadura militar de Rojas Pinilla se introdujeron normas legales que creaban una prensa estatal subsidiada por el gobierno, orientada, según este, a proteger a la ciudadanía de los periódicos de oposición. Caída la dictadura, se volvió a la fórmula tradicional y convencional de prensa libre pero responsable: el decreto legislativo 271 de 1957 fijo las reglas básicas para su aplicación (Melo, 2004).
Cabe entonces preguntarse qué factores se encuentran relacionados con la confianza ciudadana en los medios de comunicación. Para esto realizamos un análisis de regresión con los datos del estudio de 2016. Los resultados de esta estimación se presentan en la Tabla 1.
Los resultados muestran que las personas mayores, simpatizantes con una ideología de derecha, que aprueban la gestión presidencial y están de acuerdo con que los medios de comunicación representan bien las distintas opiniones que hay en Colombia, son quienes más confían en los medios de comunicación. Esto indica que la confianza en los medios de comunicación, además de ser afectada por la edad y la posición ideológica del encuestado, se modifica por las evaluaciones de los ciudadanos sobre el desempeño del gobierno en general y la percepción que tienen en materia del grado de representación de dichas organizaciones.
En particular, como muestra la Gráfica 8, solo el 12.4% de los ciudadanos que está en desacuerdo con que los medios de comunicación representan las distintas opiniones políticas de los colombianos confían en esta institución, porcentaje que asciende hasta 57.7% entre quienes creen en la representatividad de los medios.
Es pertinente destacar que la percepción sobre el control de los medios de comunicación por grupos económicos y el grado de libertad de prensa, libertad de expresión y libertad para expresar opiniones políticas sin miedo no está correlacionado con la confianza hacia los medios de comunicación. Lo anterior es paradójico al ser elementos que condicionan el desempeño de esa institución, en tanto los medios de comunicación pueden ser víctimas de la censura que perciben los ciudadanos.
El panorama descrito muestra que los medios de comunicación están perdiendo su legitimidad y credibilidad entre la población colombiana. Los bajos niveles de confianza en los medios, sumado a la percepción de ser poco representativos y autónomos, pone en entredicho su papel informativo dentro de la democracia colombiana. Este escenario es problemático, porque los medios de comunicación son vertebradores de la democracia, a partir de la información disponible los ciudadanos eligen a sus representantes y vigilan si el gobierno y sus representantes son fieles a la tarea y la confianza depositada en ellos.
En efecto, si no se asocia la noticia con verdad, y antes bien se denuncia la autonomía de los medios de comunicación y la objetividad en la información que proporcionan, cabe preguntarse con qué información los colombianos toman decisiones y cómo expresan sus posturas políticas, en un país que perciben con muy poca libertad de expresión y de prensa.
Bibliografía
Aznar Gómez, H. (s.f). “La doctrina liberal de la libertad de expresión y sus límites: el papel actual de los medios de comunicación”. Universidad C. Herrera CEU, Valencia
Carey, J W. (1997), “The press, public opinion and public discourse” en E. Munson y C. Warren (eds.). Minneapolis: University of Minnesota Press.
Melo, J.O (2004) “La libertad de prensa en Colombia: su pasado y sus perspectivas actuales” Obtenido de: http://www.banrepcultural.org/…
[1] (Carey, 1997, p.241)