Desde el año 2017, el Observatorio de la Democracia completa su trabajo de investigación cuantitativa de la opinión pública con un componente cualitativo que refuerza y explica aún más los hallazgos que hacemos en nuestros estudios sobre las opiniones y las percepciones de los colombianos.
“Hacer grupos focales es importante porque si uno lo que quiere es entender la opinión pública, tiene que ir más allá del dato cuantitativo; de un porcentaje; entender los motivos; porque una opinión no es solo un número; es una percepción; es una justificación. Detrás de una opinión siempre hay unos motivos; no solo un dato”, así explica Adriana Gaviria, investigadora que lidera el equipo cualitativo del Observatorio de la Democracia, las motivaciones del componente cualitativo que desde hace tres años este centro académico incorporó en su labor investigativa.
Y el objetivo es claro. “Busca complementar todo lo que sistemáticamente hemos recolectado a través de encuestas desde el año 2004. Por eso, estamos haciendo un repositorio de información cualitativa, yendo a los municipios que hacen parte de la muestra de cada año y buscando las voces de esas poblaciones para entender e interpretar mejor los datos que muestran las encuestas. Este proyecto comenzó con el estudio Colombia Rural Posconflicto, la muestra especial 2017. Fuimos a cuatro municipios, hicimos 16 grupos focales en total. Después, lo volvimos a hacer con la muestra del Barómetro de las Américas 2018 y estamos a punto de salir a campo con la muestra especial 2019”, explica.
El trabajo cualitativo les ha mostrado a los investigadores del Observatorio los beneficios de la complementariedad entre los métodos de investigación. Así como la encuesta puede mostrar con alto nivel de precisión en qué medida, en qué proporción o qué tanto los colombianos aprueban o desaprueban un tema, el método cualitativo permite tomar ese mismo tema, indagar de qué forma y con qué motivos la gente lo aprueba o desaprueba. Es decir, es un trabajo valioso porque al triangular la información se conocen y entienden las razones que justifican las decisiones de los entrevistados a la hora de responder una encuesta.
Además, los investigadores han encontrado una consistencia importante en los mensajes y opiniones de la ciudadanía. “Por ejemplo, —dice Gaviria— en el estudio de 2017 le preguntamos a la gente si había presencia permanente de la policía en su municipio, y qué pasaría con la seguridad si hubiera presencia permanente de esta autoridad: ¿la seguridad mejoraría, empeoraría o seguiría igual? Encontramos que era mayor la proporción que consideraba que empeoraría. Eso en la encuesta no teníamos cómo interpretarlo; iba en contra de nuestro sentido común y de lo que esperábamos”. Pero cuando fueron al trabajo de campo cualitativo el equipo puso ese dato sobre la mesa en la guía de grupo focal, les contaron a los participantes el resultado y les preguntaron qué opinaban y cómo podrían interpretarlo. Los participantes dijeron que era tal la desconfianza en la policía que ellos percibían que había una relación entre los criminales del municipio y la policía, entonces la presencia permanente de esa autoridad efectivamente podría empeorar la seguridad. “Esto nos permitió entender un dato que en un principio pensábamos que estaba equivocado o que no tenía sentido”, explica la investigadora.
Para que el trabajo cualitativo sea de alta calidad y entregue información útil y confiable, el Observatorio de la Democracia se ha concentrado en hacer grupos focales bien definidos. “En todos los municipios que hemos ido hemos hecho grupos focales buscando que esta información nos permita hacer comparaciones en dos unidades de análisis: género y edad. Eso quiere decir que los cuatro grupos focales son mujeres jóvenes, mujeres adultas, hombres jóvenes, hombres adultos. Buscamos este diseño en la recolección de información cualitativa porque hemos encontrado en la encuesta que en la opinión de las mujeres y los hombres en algunos asuntos —por ejemplo, la paz y la reconciliación— hay diferencias sistemáticas de género. No solo es que las mujeres aprueben o desaprueben más que los hombres, sino que los motivos y las variables que pesan a la hora de interpretar la opinión de las mujeres y los hombres son diferentes. Hacer grupos focales de hombres y mujeres por separado nos permite sistemáticamente analizar las opiniones y ver cuáles son las razones que justifican las opiniones de las mujeres y en qué sentido son distintas de las de los hombres”, describe Gaviria.
Además, y como uno de las líneas de investigación del Observatorio es la de actitudes y opiniones de las mujeres colombianas naturalmente uno de los temas por los que se indaga es el de los imaginarios machistas. “Un hombre en un grupo focal —agrega Gaviria— no va a hablar tan abiertamente de sus opiniones machistas si hay una mujer presente. Por eso y para evitar sesgos en la información lo que hacemos es que los grupos focales de hombres son moderados por hombres, y solo hay hombres participantes para poder capturar realmente lo que está detrás de estos imaginarios”.
Con la muestra 2019, los investigadores irán a cuatro municipios que reflejan el diseño muestral del estudio cuantitativo. “Escogimos un municipio de cada característica que se buscó en el diseño muestral. Es decir, vamos a ir a un municipio PDET de alta capacidad estatal; uno PDET de baja capacidad estatal, uno No PDET de alta capacidad estatal y uno No PDET de baja capacidad estatal. Estos son: Chaparral, Tolima; Puerto Berrío, Antioquia, Villanueva y Zambrano en Bolívar”, describe la investigadora.
Y las prioridades a trabajar en estos grupos focales ya están claras. Los ejes temáticos principales serán la capacidad institucional y la implementación del acuerdo de paz. El objetivo es conocer qué cambios ha habido después de la firma del Acuerdo de paz; qué perciben los ciudadanos en cuanto a la reforma rural integral, la reincorporación de los excombatientes de las FARC, la sustitución de cultivos ilícitos y la participación de la FARC en las elecciones regionales de 2019.
“Otro eje temático será la percepción de los ciudadanos frente a la fuerza pública. Queremos indagar sobre la confianza en la policía; el trato que reciben los ciudadanos por parte de ella y si confían en que el sistema judicial realmente responde a sus necesidades. También queremos saber cómo perciben los ciudadanos la provisión de servicios públicos en estos municipios —como salud, justicia, educación, agua—. La temática de seguridad es otro de los ejes importantes. Queremos saber qué tan expuestos están a la violencia, no solo de grupos armados, sino también delincuencia común, qué hacen para protegerse de la violencia”, agrega.
Asimismo, indagarán por las consecuencias psicológicas en términos de incertidumbre, de ansiedad, de estar expuestos a la violencia y, por ser coyuntural, investigarán, por primera vez, el tema de los líderes sociales. “Vamos a preguntarles a los ciudadanos como descifran a un líder social, cuál es el rol del líder social, qué determina que una persona sea considerada líder social o no y cuáles son los riesgos y los motivos por los cuales estas personas están en riesgo”, dice la investigadora.
¿Y qué ocurre si en los grupos focales aparecen temas que no se han contemplado? Adriana Gaviria explica que “siempre tenemos unas preguntas y unos ejes temáticos que queremos cubrir; ejes que vienen principalmente de la naturaleza del estudio. Una ventaja que nos ha traído hacer los grupos focales después de haber hecho trabajo de campo cuantitativo es que podemos analizar y profundizar un poco más los resultados de la encuesta antes de salir a campo. Eso se refleja en la sistematización de nuestra información cualitativa. Pero también estamos abiertos a lo que en el trabajo de campo cualitativo se llama categorías emergentes. Es decir, si hay un tema que sale de manera espontánea en las discusiones, nosotros la incorporamos como una variable más de análisis, que no estaba prevista pero que la incorporamos como lo hacemos con las otras preguntas”.
Un ejemplo de esas categorías emergentes fue lo que ocurrió con el tema de medios de comunicación en la primera salida de campo cualitativa —muestra 2017—. No era un interés preguntarles a los participantes qué tanto confiaban en los medios de comunicación, pero en sus opiniones, al hablar de temas políticos de sus municipios, siempre el cubrimiento de los medios era relevante. Entonces se decidió incorporarlo como una nueva unidad de análisis, y con la muestra 2019 el tema sobre la confianza en los medios de comunicación fue incluido deliberadamente en la guía de grupos focales.
La investigación cualitativa del Observatorio de la Democracia, al igual que el trabajo cuantitativo, se caracteriza por su rigurosidad; rigurosidad a la hora de elegir los temas que se van a tratar; que estos se correspondan con los de la investigación cuantitativa; rigurosidad en el perfil de las personas que se quieren en los grupos focales; en el diseño e implementación de la guía de trabajo en estos grupos y en la sistematización y análisis de la información obtenida.